viernes, 8 de agosto de 2008

Inseguridad, Moneda corriente

La inseguridad, cada vez marca más nuestras vidas. Quisas por las leyes existentes o por la mala aplicación de las mismas los delincuentes cometen actos mas violentos, dejando de lado viejos códigos. Hoy por hoy no alcanza con entregar la billetera o las joyas de la abuela, los ladrones no son ladrones, son violadores, sádicos y asesinos. Y lo mas triste es que por lo general son reincidentes que por algún fallo o por el mismo retraso de la justicia estan en libertad y sin ninguna restriccion. Sin mencionar a los menores que al no poder procesarse entran y salen como se les de la gana. La ultima novedad presidencial es que se va a tener que personalizar los nuevos celulares mediante un contrato con las huellas digitales, supongo que sera para identificar al propietario de los celulares que cometen atracos, si es una decisión acertada no lo se, pero para ello debería aplicar retroactivamente esta ley a todos los celulares en el mercado, a los chips que esten en circulación o no, a los celulares que vienen transitoria o definitivamente al país, etc, etc,...., etc. Es decir un verdadero quilombo. Quisiera saber cuando, en este país, se aplicaran verdaderas modificaciones en las cuestiones de fondo y no comunicar decisiones inútiles que lo único que buscan es tapar una noticia con otra.

martes, 5 de agosto de 2008

El Sistema penitenciario y la Justicia

En nuestro país, y seguramente en muchos otros, la justicia es lenta, ineficiente e ilógica. Se le otorga prisión domiciliaria a gente realmente peligrosa como ser violadores o condenados a perpetua por robos a mano armada y asesinos. En cambio hay pobres tipos que se comen 2 años esperando el juicio que los condene o en algunos casos cumplen condena en prisiones en las cuales los controles de seguridad e higiene son nulos y resultan ser inocentes y por un error se les arruina la vida porque son sometidos para vejámenes a los cuales no están preparados. No seria mas lógico que la prisión domiciliaria fuera concedida a estos individuos que siendo culpables o no esperan el juicio del estado y es necesario que nuestros impuestos paguen prisiones por punguitas y estafadores que si bien son delincuentes, sus armas no son ni pistolas ni cuchillos sino nuestro descuido e ignorancia?. Pudiendo ponerles estas famosas pulseras monitorizadas y encerrarlos en su propio departamento. Haciéndose cargo ellos mismos o sus familias de los gastos que ocasionen.